lunes, 26 de mayo de 2014

La Ranita Demetan (1973)

La Ranita Demetan (1973)


Entre los años setentas del siglo pasado los japoneses estaban desarrollando una tecnología secreta que permitiría convertir las lágrimas de los niños en un poderoso combustible.
¿Qué?
¿No?
¿Entonces cómo explicar la existencia de series como Remi, Candy Candy o la ranita Demetan?
Lo cierto es que en la segunda mitad del siglo XX los japoneses lograron ponerse a la vanguardia en lo que animación se refiere. Pero si algo caracterizaba a las series de anime de los años setentas y ochentas era la abundancia de momentos tristes, muertes de personajes y general desolación que los personajes tenían que atravesar antes de alcanzar la felicidad. Famosos son los casos de Remi y Candy Candy, personajes con una mala estrella tan pesada que no podían entrar a un sitio sin que tarde o temprano hubiera velorio.


 imagentomada de http://www.tucomiquita.com/anime/ranita_demetan_fotografias.asp

Sin embargo casi nadie recuerda series como la ranita Demetan o José Miel, series donde la terrible cadena de muertes, homicidios y vejaciones se enmascara bajo el pretexto de que la naturaleza es amoral.
Tan solo ver los dos primeros minutos de la serie de la ranita Demetan nos hace ver que la cosa va a estar para drenar nuestros ojos:
La familia de Demetan es expulsada del “estanque plateado” por una horda de salamandras sin que puedan hacer nada. Las salamandras, en el ataque, se comen a la mayor parte de los vástagos de la familia. Los sobrevivientes logran ponerse a salvo sobre una hoja flotante y son llevados por la corriente de un arroyo… solo para que un derrumbe los separe.
Increíblemente las situaciones que muestra la ranita Dementan están distantes de ser fantasía. Aquí la “naturaleza cruel” es en realidad la máscara para mostrar a los niños problemas reales como el bullying, la corrupción, la discriminación, la pobreza o las mafias. En el primer episodio el padre de la ranita es extorsionado: si desea vivir en el “estanque arcoíris” debe dar la mitad de lo que gana al alcalde. Cuando trata de negarse recibe una paliza y luego su casa es destrozada.
Para una serie que se hizo hace a más de 40 años la animación es buena, aunque a veces las reacciones de los personajes resultan extrañas y un tanto exageradas, es raro decir que una caricatura “sobreactúa” pero la verdad es que esa impresión da por momentos. Sin embargo tiene a su favor que la historia trata sobre valores que aun hoy consideramos universales como el amor, la amistad y la justicia. Así, Demetan se aferra al único verdadero amigo que parece tener en el mundo: la hija del alcalde. La situación podría parecernos forzada y poco real, pero también es el símbolo de que la luz puede brillar en los túneles más oscuros.
Las desventuras de la ranita tienen más sentido de lo que al principio parece. Los infortunios de la rana pueden parecernos crudos y demasiado fuertes, pero los grandes héroes no se forjan con plumas y malvaviscos. Los occidentales estamos acostumbrados a que los buenos siempre ganen, a las risas y a los villanos torpes. Lo cierto es que en el fondo, bajo la premisa de hacer cosas limpias para los niños, hemos suavizado demasiado las cosas y las hemos despojado de gran parte de su sentido.
Sí, estamos acostumbrados a que los personajes de las caricaturas hagan y deshagan pero no los vemos enfrentar problemas de la vida real. Si al fin y al cabo las televisoras van a gastar dinero en una campaña contra el bullying o la discriminación ¿no sería bueno que las series animadas también trataran el asunto?
La serie fue creada en el año de 1973. Quizás sea tiempo de desempolvar héroes como la ranita Demetan.
más información:

http://es.wikipedia.org/wiki/La_ranita_Demetan
primer episodio de la ranita Demetan:
http://www.youtube.com/watch?v=dy5z2php--s

No hay comentarios:

Publicar un comentario